Abriendo el debate
Desde el nacimiento se clasifica a los bebés por el sexo y se le asignan una serie de características y roles. A partir de los dos años los niños/as comienzan a tener intereses estereotipados, los que la sociedad considera apropiados. Sobre los 30 meses casi todos los niños pueden decir si son varones o mujeres (Gessell) A partir de los tres años recurren a los aspectos externos de la identidad para rechazar o aceptar juguetes, ropa, actividades… A partir de los cinco años adquieren el esquema de identidad permanente y de que ésta no depende de su voluntad o de las apariencias sino que es un hecho estable y biológico (constancia de género). Este proceso no culmina hasta los 8 años. Para Hess y Doren, la construcción de roles y adquisición de la identidad por parte del niño/a, es el producto de un proceso en el que confluyen autoestima, autoconcepto e identidad. Además hay que tener en cuenta los factores relacionados con este proceso como: · La edad: a la vez que l